En la búsqueda por abordar problemáticas relevantes en salud pública, los semilleros de investigación de la Universidad de La Salle han demostrado ser espacios de formación y proyección profesional.
Laura Valentina Ávila Vargas, egresada del programa de Medicina Veterinaria en 2024, comparte su experiencia como miembro del semillero ‘Una Salud’ de la Facultad de Ciencias Agropecuarias, especializado en estudiar las conexiones de la salud animal, humana y ambiental.
El comienzo de un proyecto significativo
En 2022, Laura se unió al semillero tras conocer sobre un innovador proyecto de investigación desarrollado en colaboración con el Instituto Politécnico y Universidad Estatal de Virginia (Virginia Tech, Estados Unidos).
Este proyecto se centró en el estudio de la ecología de los murciélagos como transmisores del virus de la rabia en animales de producción.
“Tuve la oportunidad de participar en dos expediciones en 2022 y 2023, lo que no solo me permitió ampliar mi conocimiento, sino también interactuar con estudiantes y profesionales de otro país”, recuerda Laura.
Esto con el fin de explorar los métodos de control de las poblaciones de murciélagos vampiros mediante anticoagulantes de manera interdisiciplinaria.
Este trabajo interdisciplinario llevó a la redacción del artículo científico, desarrollado junto a los profesores de Unisalle Diego Soler-Tovar y de Virginia Tech, Luis E. Escobar; así como Quan Dong, estudiante de Virginia Tech, publicado en diciembre de 2024 en la revista ‘Zoonoses and Public Health’, una publicación de acceso abierto y cuartil 1 en su campo.
“El proceso de redacción fue muy enriquecedor”, comenta Laura, pues participar en la escritura de un artículo le permitió aplicar los conocimientos adquiridos en la práxis investigativa de la malla curricular y experimentar el acompañamiento continuo y los valiosos aportes de los docentes de Unisalle y Virginia Tech.
Los hallazgos
En América Latina la rabia transmitida por murciélagos vampiros (Desmodus rotundus) afecta gravemente a los bovinos, aumentando su mortalidad y perjudicando el desarrollo del sector pecuario.
Desde la década de los 70, se han utilizado anticoagulantes como método de control, con distintas presentaciones y dosis. Sin embargo, aunque se reporta hasta un 100 % de efectividad en la mortalidad de murciélagos, no hay evidencia clara de su impacto en la reducción de la rabia, pero sí se podrían alterar las colonias de murciélagos, lo que puede generar un aumento de la prevalencia de la rabia, esto sugiere que los anticoagulantes podrían ser contraproducentes.
“Es necesario realizar estudios de campo con control riguroso que consideren la ecología del murciélago y evalúen métodos más efectivos. Por lo tanto, el uso de anticoagulantes para el control de la rabia sigue siendo cuestionable”, concluye Laura.
Más allá de las aulas
Laura destaca que ser parte del semillero no solo la ayudó a definir su interés en la investigación y la salud pública, sino que también fue clave para su desarrollo profesional.
“Este artículo fue mi modalidad de grado y me abrirá puertas para futuras oportunidades, como participar en una maestría. Además, me permitió darme cuenta de que quiero seguir colaborando en proyectos similares”.
Para Laura, los semilleros son una plataforma invaluable: “Invito a los estudiantes a buscar semilleros que se alineen con sus intereses. Participar en ellos no se siente como una carga, sino como una experiencia enriquecedora que puede abrir muchas puertas”.